Eslabones de la logística en la cadena de frío
La temperatura, rotación, control, transporte, carga y descarga son algunos de los puntos a tener en cuenta en el manejo de la cadena de frío. Conozca para qué se usa, cuáles son sus beneficios, cuáles sus procedimientos y qué recomendaciones se dan en el manejo de productos dentro de la misma.
Para entender mejor este aspecto, hay que conocer más sobre el concepto conocido como “la cadena de frío”. Esta cadena no es más que una sucesión de procesos logísticos (almacenaje, distribución, embalaje, transporte, carga y descarga) que requieren mantener una temperatura y humedad relativas controladas, desde la elaboración del producto hasta su llegada al consumidor final.
Según los expertos en el tema, los eslabones de la cadena de frío son:
• Pre-enfriamiento.
• Almacenamiento en frío antes de transportarse para comercializarse.
• Transporte refrigerado.
• Cámara refrigerada en los puntos de venta.
• Exhibición y venta en un equipo refrigerado.
Es importante entender que, aunque todas estas partes se encuentren presentes dentro de la estructura logística, la ausencia o la falla que se cometa en alguno de estos puntos repercute negativamente en la conservación de los productos, lo cual obviamente significaría una perdida dentro del proceso de comercialización (ya sea de flores, helados, frutas, etc.).
Al lograr implementar un proceso completo y adecuado de la cadena de frío se puede lograr entre otras cosas:
• Minimizar las pérdidas en el proceso de post-cosecha.
• Aumentar la calidad en la producción.
• Atraer un mayor número de consumidores.
• Exhibir diversos productos, independientemente de su naturaleza.
Puntos clave para las empresas Algunas recomendaciones que se dan a las empresas que manejan productos dentro de la cadena de frío son:
• Temperatura: se debe mantener el producto en temperaturas que oscilan entre los 18ºC y los 40ºC durante toda la cadena de frío, dependiendo del tipo de producto que estemos manipulando y las condiciones en las que se ofrece. No es lo mismo mantener un producto congelado que realizar todo el proceso para llevarlo de una temperatura ambiente a congelación. Igualmente, existen procesos que deben ser controlados no solamente en temperatura sino también en humedad relativa y esto se da para productos como las flores o frutas y verduras, las cuales deben ser cuidadosamente almacenadas y sus condiciones de operación en cuanto a temperatura y humedad son muy estrictas.
• Envase: los productos se deben empaquetar herméticamente para que no sufran cambios de temperatura.
• Rotación: la rotación del inventario se debe hacer a través del sistema FIFO (el primero que entra, es el primero que sale).
• Control: se debe llevar un control y medición de la temperatura durante toda la cadena. Es recomendable hacer controles antes de cargar los productos, mientras se transportan y antes de su acopio y entrega al consumidor final.
• Transporte: los vehículos deben tener instrumentos de medición de temperatura. No hay que transportar diferentes productos con requerimientos de calor que no sean los mismos.
• Cargas y descargas: hay que preenfriar los vehículos antes de la carga, y por lo tanto sus puertas no deben abrirse hasta que ese proceso esté finalizado. Es importante tener en cuenta, en este punto, que el no perder la cadena de frío implica que se implementen salas de proceso con temperaturas controladas que permitan la operación de alistamiento en los momentos de cargue y descargue del producto.
• Almacenaje: los productos deben almacenarse de tal forma que no se entorpezca el paso del aire que los enfría. Para esto, se recomienda dejar pasillos de circulación y no almacenar el producto obstaculizando la salida del aire que producen los evaporadores.
Tecnología y Control
El éxito dentro de la cadena de frío está ligado a una adecuada combinación entre la inversión de la tecnología y la rentabilidad que esta puede traerle a la empresa. El factor determinante lo representa el mantenimiento de la temperatura y de todos los factores que influyen para que esta no se corte en alguna parte de la cadena.
Estas son las partes que componen la Administración de Cadena de Frío
Para dar solución a estas necesidades, las empresas de refrigeración vienen actualizando sus tecnologías para ir cumpliendo con las expectativas de los clientes. Es así como encontramos equipos que están a la vanguardia en el ahorro energético, considerándose esta como una de las variables más álgidas a controlar, por los costos que representa.
Asimismo, se considera que el control constante de los procesos se vuelve imperioso para el buen funcionamiento de los equipos frigoríficos, por lo cual se implementan sistemas de monitoreo que permiten evidenciar al instante la operación de los cuartos fríos. Estos sistemas generan reportes y avisos que permiten que los departamentos de mantenimiento actúen de forma preventiva, reduciéndose así pérdidas en el producto y sobre costos de operación por traslados de mercancía. Además, se diseñan equipos que por su tamaño y versatilidad permiten que los clientes hagan un mejor aprovechamiento del espacio para el almacenamiento de mercancías, lo que representa beneficios en la optimización y aumento de la capacidad para guardar producto.
La logística en la cadena de frío se ha convertido, entonces, en uno de los factores más importantes, y del cual los clientes se están preocupando cada día más, ya que los objetivos comerciales del mercado están apuntando a entregar productos en óptimas condiciones de calidad y precio. La globalización ha propiciado que los países deban ser cada vez más competitivos en los mercados internacionales y, por esto, somos conscientes de que las tecnologías avanzan cada día más y se vienen preparando para cumplir con estos retos, siendo la relación Cliente–Proveedor un ejemplo claro de esto, ya que se busca entregar soluciones integrales que permitan colmar las expectativas de las empresas y sus clientes, estando, al mismo tiempo, a la vanguardia en cuanto a los avances tecnológicos.
Terzer