La competitividad no cae del cielo, se diseña

como definir competitividad en una palabra «Ventaja»

Si tuviésemos que definir la competitividad empresarial en pocas palabras, podríamos decir que ser competitivo es la capacidad que tiene nuestra empresa de hacer las cosas mejor que su competencia, ya sea en términos de producto, servicio, producción, costes, calidad,… de manera que al final suponga una ventaja a la hora de hacer nuestro negocio más rentable.

LA COMPETITIVIDAD / Las soluciones de competitividad son diferentes en cada caso y para cada empresa, por lo que es importante que dediquemos un tiempo a detectar cuáles son los factores principales que nos pueden llevar a conseguir esa diferenciación y qué estrategias vamos a adoptar para mejorarlos.

¿Necesitamos acelerar nuestro crecimiento? ¿Tenemos capacidad de expandir el negocio nacional o internacionalmente? ¿Aporta nuestro producto o servicio algún valor añadido (calidad, precio, atención al cliente,…) a los de la competencia? ¿Debemos invertir en mejorar la eficacia de nuestros procesos para crecer en rentabilidad? ¿Podemos abrir nuevos canales de comercialización? ¿Existen segmentos de clientes nuevos a los que puedo llegar?

Todas estas preguntas son sólo algunas de las reflexiones que debemos efectuar de cara a poner en marcha un plan para la mejora de nuestra competitividad.

LA INNOVACIÓN / La innovación es el medio a través del cual se crean nuevos recursos generadores de riqueza o dotan a los recursos existentes de mayor potencial para crearla, es una clara  respuesta a los desafíos económicos actuales, particularmente a la hora de competir en un mundo globalizado, sin fronteras. Sin embargo, uno de los problemas más acuciantes de nuestro país es el reducido número de empresas y emprendedores que basan su competitividad en innovación.

Creemos que “innovar marca la diferencia” porque la innovación no es sólo un proceso tecnológico o académico, sino que se puede actuar en múltiples áreas de negocio de la empresa de forma coordinada y se plantea como un pilar fundamental para crecer en productividad y sobrevivir en el entorno económico actual tan complicado.

La innovación exige un serio compromiso y la idea de ofrecer iniciativas de verdadera utilidad en las empresas y por los emprendedores han demostrado que la creatividad, la capacidad de nuevo aprendizaje, empuje y pasión suficiente para reaccionar y defender con éxito sus proyectos en tiempos difíciles.

LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS / Las empresas se están enfrentando a un entorno macroeconómico complicado, aunque la adopción de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) no deja de crecer. Las TIC continúan siendo las mejores aliadas de los empresarios en su intento de mejorar la competitividad de sus negocios, posibilitando la apertura a nuevos mercados y optimizando los procesos de gestión interna.

Por primera vez algunas tendencias de las nuevas tecnologías, están comenzando a tener una presencia entre las empresas. No cabe duda de que las TIC forman parte, en mayor o menor medida, de la vida diaria de las empresas y microempresas.

LA CULTURA FINANCIERA / Una de las dificultades más importantes de empresas y de emprendedores es la falta de financiación para emprender un proyecto de innovación. Esta situación empeora con el tamaño de las empresas ya que a menor tamaño mayor es la dificultad de acceder a los instrumentos financieros, haciendo imposible iniciar nuevos proyectos, acometer inversiones, en definitiva, sobrevivir y crecer.

Cuando conoces las alternativas para financiarte todo es más fácil, puedes poner en marcha tu proyecto o esa nueva línea de negocio, nueva tecnología, mejoras tu empresa, la haces más fuerte, la conoces mejor, sabes dónde están tus debilidades y cómo solucionarlas, puedes mejorar  los plazos de cobro de tus clientes, optimizar los calendarios de pago a proveedores, tener unos estados financieros más saneados, en definitiva, ser más competitivo.

LA COMPETITIVIDAD EN EL MERCADO / El comercio es un sector estratégico en nuestra economía, donde la actividad comercial ejerce un importante papel en la vida y la actividad económica de las ciudades constituyendo uno de los principales elementos visibles de su desarrollo.

No se debe perder de vista las distintas áreas que intervienen en la competitividad que van desde el Giro comercial, La tecnología, Herramientas digitales, Mercadotecnia, Productos, Servicios, Proveedores, etc.

Las condiciones, métodos, formatos y toda la administración que gira alrededor, conocer las posibilidades que te puedan generar crecimiento están desde beneficios de tus proveedores o cambio de ellos en mejores condiciones, mejores puntos de venta, es esencial si quieres diferenciarte de tu competencia y aumentar tus ventas. Se debe identificar tu potencial de crecimiento y apoyarte en el desarrollo de la solución que mejor se adapta a tu negocio.

Como primer paso se debe crear un programa completo de acciones que te permitirán innovar, conocer las últimas tendencias e incorporar nuevas tecnologías para convertir tu comercio en un negocio competitivo.

Además, la competitividad del comercio influye también en el crecimiento de otros sectores conectados con el tuyo. Potenciar estos entornos también es clave para lograr un crecimiento de los comercios en general que al mismo tiempo como espejo potencian al tuyo.

Luis Lagos / Cámara Comercio España

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